
Si hay un lugar en el que no hace falta mucho para darse cuenta que su aire no es muy sano, son los sanitarios de diversos lugares que reciben público.
Gasolineras, escuelas, salas de congresos, pabellones de ferias, empresas, campings, playas... Tantas lugares donde nos da apuro tener que entrar.
Tanto por la contaminación extremadamente elevada en bacterias como por los olores a veces insostenibles, la tecnología Beewair ofrece el tratamiento idóneo. Devuelve limpieza y un aire sano sin tanta molestia.
Beewair es sinónimo de calidad de vida, en todos los lugares que frecuentamos usualmente o excepcionalmente.